sábado, 27 de octubre de 2007

Apellido Riverol

La Familia Rivarola en España
Rev. 15/05/2005
Por: Jorge A. Rivarola Encabo Diversos documentos datan la entrada de la familia Rivarola en España alrededor del siglo XV y XVI. Así encontramos a un tal Juan Bautista de Riverol, genovés, del cual se tiene noticias por el año 1487 en las Islas Canarias y que tenía tratos con Colón y estaba emparentado con los Cibo de Italia. Podemos encontrar datos de la descendencia de Juan Bautista en la historia Canarias y además en el Nobiliario de Canarias entre otros documentos. A los descendientes de Juan Bautista y demás familias Rivarola llegadas al reino de España, se les denominó en diversos escritos y documentos oficiales de la época como: Rivarola, Rivarolo, Riverola, Riverol y Riveroles o Riberoles entre otros. En la época del Rey Don Felipe II el Prudente (Valladolid 1556 - El Escorial 1598), encontramos documentada la venida de miembros de la familia Rivarola a Sevilla en la obra titulada “Nobiliario de los Rivarola, oriundos de la villa de Chavarriz, en la República de Génova”, se refieren al asentamiento en Sevilla de Don Luis de Rivarola y Arada, natural de la República de Génova en Chiavari.
Sobre la historia de la familia Rivarola en Canarias, nos encontramos con el siguiente escrito de Sergio Aguiar Castellano, realizado para la página web del municipio de Guía y que dice así:
“Acabada la Conquista de Gran Canaria (1483) los repartimientos de tierras y aguas constituyeron las medidas que tomó la Corona para que las islas se poblaran.
Los repartimientos de las tierras de Agaldar, comenzaron en 1485 y en los mismos corresponden al conquistador Sancho de Vargas y Machuca las tierras de la Dehesa de Tamaragaldar. En estas tierras donde Sancho de Vargas manda a construir una ermita en honor a Santa María de Guía, en torno a 1505 y que concluye en 1509. Alrededor de esta ermita va naciendo un núcleo poblacional que, poco a poco, va adquiriendo mayor protagonismo, pues en las tierras adyacentes desde años antes, se van levantando ingenios azucareros, por parte de destacados comerciantes y propietarios de origen genovés como las familias Riverol, Cibo de Sapronis o Cairasco, familias con un destacado papel en el descubrimiento de América, ya que fueron banqueros que financiaron algunos de los viajes de Colón. Junto a ellos se instalaron colonos de origen español y portugués, estos últimos muy relacionados con la explotación de la caña de azúcar.
Ante la destacada importancia que va adquiriendo el núcleo urbano creado en torno a la ermita de Santa María de Guía, el Gobernador y Justicia Mayor de la isla de Gran Canaria, Martín Fernández Cerón, en 1526 concede a este núcleo poblacional "Alcalde e Vara de Justicia", nombrando a Fernando Alonso de la Guardia primer Alcalde Real de Guía de Gran Canaria”.
En este texto se hace referencia a la familia de origen genovés denominada Riverol y no Rivarola, no obstante, es una traducción del apellido al español que no resulta extraña si tenemos en cuenta la traducción realizada del apellido cuando se habla del literato y político francés de origen italiano Antoine Rivarol (Bagnols 1753 – Berlín 1801) y supuesto Conde de Riverol, que en realidad se llamó Antoine de Rivaroli; Así mismo nos encontramos en una edición argentina de la enciclopedia Espasa, la biografía del militar español Don Sebastián Riverola y Pineda, cuando en realidad se trata de Don Sebastián Rivarola y Pineda. Por otro lado el apellido Riverol o Rivarol, no está documentado o no existía con anterioridad a esta familia Riverol de Canarias, ni en Italia, ni en ningún otro lugar. Pero definitivamente, la prueba la encontramos en un ensayo crítico realizado por Marvin Lunenfeld en el año 1992 titulado en inglés “Columbus and Spain: Accident or Destiny?, el cual considero por la bibliografía utilizada, bastantemente bien documentado y en la cual hace mención de dos genoveses: Francesco da Rivarola [Riberol] y Francesco Pinelli [Pinello], consejeros de la ciudad de Sevilla y que además tenían inversiones en Canarias, el autor ya referencia Riberol con Rivarola.
Otra conclusión que podemos sacar, se refiere a la familia Cibo en canarias, de origen genovés y su relación con los Riverol de Canarias. Además, por otro lado, los Rivarola afincados en Sevilla estaban emparentados con los Cibo en Génova, lo cual podría demostrar la conexión entre las dos familias y, por tanto, deducir una vez más un mismo origen y apellido.
En el pregón de las fiestas de la virgen de Guía del año 1991 escrito por Santiago Betancort Brito, se menciona a Juan Bautista de Riverol con el siguiente texto.
“ Hoy, siete de agosto de 1.991, es la víspera. Remontémonos quinientos años atrás y saquemos conclusiones.
Siete de agosto de 1.491. Junto a la loma, y en el gran Valle de las Garzas, cercado por el hoy volcán extinguido de la Montaña de la Atalaya y la Tierra Blanca que encabeza la zona de medianías de nuestro término municipal, al Noroeste de la recién conquistada isa de Gran Canaria, se cumplen 4 años del asentamiento de Juan Bautista de Riverol, protagonista de la sonada escisión del que había sido poderoso reino aborigen de Gáldar. Testigos directos de aquella "rebelión" fueron Fernando de Montemayor, Marentes, Esteban Zambrano, Francisco López, Juan de Ceverio, el cronista Pedro de Argüello, Gonzalo de la Rojana, Francisco de Porras, Ruy González Verde, Rodrigo de Vara, Juan Rodríguez de la Caña, Gonzalo de Aguilar y, principalmente, Sancho de Vargas y Machuca, todos ellos radicados en el Valle tras los repartimientos de la Conquista. Si desde su Tierra Blanca (?) hoy, Ingenio Blanco-, los Riveroles extendieron la semilla de algo distinto de lo que entonces era ya el exreino de Guanarteme, que dominó todo el extremo-norte, fue Sancho de Vargas quién redondeó la iniciativa.
Ocho días más tarde de aquel siete de agosto de 1.491 (?) como así puede desprenderse de las investigaciones realizadas hasta ahora-, el ilustre castellano levantaba una ermita bajo la advocación de Santa María de Guía, floreciendo pujante años más tarde nuestro municipio”.
En el mismo pregón se menciona al genovés Francisco de Riverol y su conexión con Cristóbal Colón al tratarse la investigación sobre el origen de la ciudad de Santamaría de Guía en Canarias con el siguiente párrafo;
“Francisco Morales Padrón, da otra interesante pista que justifica la existencia de Guía en 1.492, cuando habla de la compañía que Fernández de Lugo formó, con Florentino Berardi y el genovés Francisco de Riverol, afincado en Guía, quién además cedió dinero a Cristóbal Colón para su cuarto viaje a las Indias”.
De este párrafo destacaremos una vez más la conexión Génova – Canarias – Sevilla con la entrada de la familia Rivarola en España, de la cual cabe destacar el papel importante jugado por la familia Rivarola en estas ciudades.
En lo referente a la familia Rivarola en Sevilla, Don Juan Félix Rivarola y Pineda (2) refiriéndose a Sebastián de Rivarola y Pineda , descendiente de Luis de Rivarola y Arada, dice: “cabeza y pariente mayor de los Rivarola en España e Italia” con lo cual deja saber que se trata de una rama primigenia.
De la conexión con la familia Cibo anteriormente mencionada, encontramos a Don Estephano Jerónimo Rivarola Justiniano, Señor de la Casa Rivarola en Chiavari en la República de Génova, casado con Doña Catalina Corbet y Cibo hija de Antonio Corbet y de Juana de Valencies Cibo Spinola y Colón; año 1519.
El ingreso de la familia Rivarola en Sevilla , está perfectamente documentado en diversas obras y estudios genealógicos realizados por diversos autores españoles. Encontrándose muchas de estas obras en la Biblioteca Nacional de Madrid y de esta documentación se puede afirmar que la familia Rivarola llego a integrarse perfectamente a la nueva sociedad en la que se encontraba; sus primeros vástagos ocuparon puestos importantes de mayor o menor relevancia y entre los cuales podemos destacar al familiar del Santo Oficio Juan Félix Francisco Rivarola y Pineda, autor de una obra genealógica sobre la serenísima república de Génova y otra sobre la monarquía española; al militar Don Sebastián de Rivarola y Pineda que participo en la conquista de América; a Don Francisco de Rivarola, fundador y poseedor del Mayorazgo de Rivarola en España.
Don Estephano Geronimo Rivarola Justiniano, Señor de la Casa de Rivarola, en la villa de Chiavari en la republica de Génova donde se caso con Doña Cathalina Corbet y Cibo hija de Antonio Corbet y de Juana de Valencies Cibo Spinola y Colón año 1419. Fuerón padres de Luis, Martino y de Doña Cathalina.
Don Martino de Rivarola y Corbet, se caso en la Villa de Chiavari con Doña Teresa Campodonico y fuero padres de Don Gregorio Rivarola y Corbet Campodonico
Don Gregorio Rivarola y Corbet Campodonico, nació en Chiavari y paso a España en el año 1438 hizo su asiento y morada en la ciudad de Sevilla donde se caso con Doña Victoria Ayrolo, y de este matrimonio nacieron Doña María y don Esteban de Rivarola Corbet y Ayrolo.
Don Esteban de Rivarola Corbet y Ayrolo, Alguacil del Santo Oficio de la Villa de Chucena en la actual Huelva donde se caso con Doña Ana Lambermayn y fueron padres de Don Francisco Rivarola Corbet y Ayrolo Lambermayn.
Don Francisco Rivarola Corbet y Ayrolo Lambermayn, Oficial Titulado del Consejo de la Suprema, y Alguacil Mayor del Santo Oficio de la Inquisición en la Villa de Chucena; Fundador y primer poseedor del lustroso Mayorazgo de Rivarola en España, fué 24 perpetuo de Sevilla. Se caso con Doña Theresa Peregrina Ayrolo Corbet, no habiendo descendencia.
Don Luis de Rivarola Corbet y Cibo, nacido en Chiavari, hijo de Don Estephano Geronimo Rivarola Justiniano y casado en esta misma ciudad de la República de Génova con Doña Ana de Arada Ravaschiero y Fiesco, hija de Francisco de Arada y de Doña Ana Ravaschiero y Fiesco Doria Negron; en el año 1570, Luis Rivarola Corbet y Cibo fué padre de: Don Luis de Rivarola y Arada, natural de la República de Génova en Chiavari que paso a España y se casó en Sevilla con Doña Leonor López de Castro Cifuentes Monsalve, hija de Francisco López de Castro Medina y Mendoza; año 1590 (1).
Bibliografía:
1. Nobiliario de los Rivarola, oriundos de la villa de Chavarriz, en la República
de Génova. Libros II-VII
Fecha: a. 1750 Des. Física: 261 h. ; 32 x 23 cm. Notas: Índice en h. 258-261 Abundantes escudos dibujados a pluma y coloreados, y árboles genealógicos Ref.bibliogr.: García Cubero, p. 397, nº 3058 Deposito: Biblioteca Nacional de Madrid, Materia: Rivarola (Familia)-Genealogía.
2. Descripción Histórica de Génova
Fecha: 1729Autor: Juan Félix Francisco Rivarola Pineda Rodríguez de Cardenas.
Glosario:
Mayorazgo
De Wikipedia, la enciclopedia libre.Institución del derecho castellano que permitía mantener un conjunto de bienes vinculados de manera que no pudiera nunca romperse este vínculo. La creación de un vínculo comenzaba normalmente mediante la vinculación de un solar o una casa solar. A veces, estos vínculos incluían un título nobiliario y a todos se les suponía de alguna manera la condición de hidalguía. Era posible con el tiempo añadir nuevos bienes al vínculo, pero los bienes ya vinculados no podrían ser enajenados ni repartidos en herencia.
En consecuencia, todos los bienes que formaban parte del vínculo eran heredados indisolublemente por el heredero del mayorazgo. Las condiciones exactas para heredar se fijaban en el momento de crear el vínculo y solían incluir determinadas obligaciones que debía cumplir el heredero entre las que era muy habitual la adopción del apellido del vínculo. El heredero no tenía por qué ser el mayor de los hijos varones, podía ser cualquiera de los hijos tanto de uno como de otro sexo al que se considerara el más capacitado para suceder en el vínculo.
Los demás hijos sólo podían heredar aquellos bienes libres que los padres poseyeran que, invariablemente, eran escasos. Aparece por tanto la costumbre de que los segundones emprendieran una carrera militar o eclesiástica al quedar desheredados y carecer de otros medios de subsistencia. La situación de las hijas no era mejor ya que no podían realizar un buen casamiento sin una buena dote, que había de provenir necesariamente de los bienes libres de los padres. Quedaba la vía, adoptada por muchas, de ingresar en un convento pero su condición en el mismo estaba también sujeta a la existencia de dote.
Esta fuga, que resultaba irreversible, de los hijos hacia la carrera eclesiástica resultaba a veces dramática cuando los posibles herederos del mayorazgo morían sin descendencia y era necesario recurrir a parientes más o menos distantes que resultaban agraciados con una súbita mejora en su situación.
Esta institución estuvo vigente hasta la Ley Desvinculadora de 1820 que suprimió todos los vínculos. A pesar de ello, en algunas zonas pudo pervivir algún tiempo mediante una triquiñuela ya que la ley no tuvo en cuenta las donaciones entre vivos. Lo que empezó a ocurrir fue que el poseedor del mayorazgo se lo entregaba a su hijo como aportación a su matrimonio y el hijo pasaba a ser el nuevo señor pasando sus padres a disfrutar de un cierto usufructo de por vida de la mitad de la casa solar.

Don Luis de Rivarola Corbet y Cibo, nacido en Chiavari, hijo de Don Estephano Geronimo Rivarola Justiniano y casado en esta misma ciudad de la República de Génova con Doña Ana de Arada Ravaschiero y Fiesco, hija de Francisco de Arada y de Doña Ana Ravaschiero y Fiesco Doria Negron; en el año 1570, Luis Rivarola Corbet y Cibo fué padre de: Don Luis de Rivarola y Arada, natural de la República de Génova en Chiavari que paso a España y se casó en Sevilla con Doña Leonor López de Castro Cifuentes Monsalve, hija de Francisco López de Castro Medina y Mendoza; año 1590 (1).
Bibliografía:
1. Nobiliario de los Rivarola, oriundos de la villa de Chavarriz, en la República
de Génova. Libros II-VII
Fecha: a. 1750 Des. Física: 261 h. ; 32 x 23 cm. Notas: Índice en h. 258-261 Abundantes escudos dibujados a pluma y coloreados, y árboles genealógicos Ref.bibliogr.: García Cubero, p. 397, nº 3058 Deposito: Biblioteca Nacional de Madrid, Materia: Rivarola (Familia)-Genealogía.
2. Descripción Histórica de Génova
Fecha: 1729Autor: Juan Félix Francisco Rivarola Pineda Rodríguez de Cardenas.
Glosario:
Mayorazgo
De Wikipedia, la enciclopedia libre.Institución del derecho castellano que permitía mantener un conjunto de bienes vinculados de manera que no pudiera nunca romperse este vínculo. La creación de un vínculo comenzaba normalmente mediante la vinculación de un solar o una casa solar. A veces, estos vínculos incluían un título nobiliario y a todos se les suponía de alguna manera la condición de hidalguía. Era posible con el tiempo añadir nuevos bienes al vínculo, pero los bienes ya vinculados no podrían ser enajenados ni repartidos en herencia.
En consecuencia, todos los bienes que formaban parte del vínculo eran heredados indisolublemente por el heredero del mayorazgo. Las condiciones exactas para heredar se fijaban en el momento de crear el vínculo y solían incluir determinadas obligaciones que debía cumplir el heredero entre las que era muy habitual la adopción del apellido del vínculo. El heredero no tenía por qué ser el mayor de los hijos varones, podía ser cualquiera de los hijos tanto de uno como de otro sexo al que se considerara el más capacitado para suceder en el vínculo.
Los demás hijos sólo podían heredar aquellos bienes libres que los padres poseyeran que, invariablemente, eran escasos. Aparece por tanto la costumbre de que los segundones emprendieran una carrera militar o eclesiástica al quedar desheredados y carecer de otros medios de subsistencia. La situación de las hijas no era mejor ya que no podían realizar un buen casamiento sin una buena dote, que había de provenir necesariamente de los bienes libres de los padres. Quedaba la vía, adoptada por muchas, de ingresar en un convento pero su condición en el mismo estaba también sujeta a la existencia de dote.
Esta fuga, que resultaba irreversible, de los hijos hacia la carrera eclesiástica resultaba a veces dramática cuando los posibles herederos del mayorazgo morían sin descendencia y era necesario recurrir a parientes más o menos distantes que resultaban agraciados con una súbita mejora en su situación.
Esta institución estuvo vigente hasta la Ley Desvinculadora de 1820 que suprimió todos los vínculos. A pesar de ello, en algunas zonas pudo pervivir algún tiempo mediante una triquiñuela ya que la ley no tuvo en cuenta las donaciones entre vivos. Lo que empezó a ocurrir fue que el poseedor del mayorazgo se lo entregaba a su hijo como aportación a su matrimonio y el hijo pasaba a ser el nuevo señor pasando sus padres a disfrutar de un cierto usufructo de por vida de la mitad de la casa solar.

2 comentarios:

Jonatan Riverol dijo...

Muy interesante artículo sobre nuestro ilustre apellido. Por cierto la Corona española nos debe muchos maravedíes, que con 500 años de intereses será una verdadera fortuna.

Carlos Riverol dijo...

Interesante, pero erróneo. Los trabajos de Leopoldo De la Rosa Olivera, Giancarlo Briasco y Giovanni Cipollina demuestran y aclaran la verdadera historia de los Riverol. Te los puedo enviar.

Un saludo.